Nutrición y Cáncer | Lo que puedes comer para prevenirlo

Nutrición y Cáncer

La Nutrición y el Cáncer, un tema interesante donde aprenderemos a estar en salud, y a como evitar desarrollar algún tipo de tumor en el cuerpo. Por supuesto, «evitar desarrollar un tumor», es actualmente imposible para la ciencia. Sin embargo, gracias a los estudios clínicos sobre el cáncer, hemos podido encontrar formas de prevenirlo. Con estos métodos preventivos relacionados a la nutrición, reduciremos la posibilidad de desarrollar cáncer.

El cáncer es una enfermedad terrible que afecta a millones de personas en todo el mundo cada año. Afortunadamente, hay varios alimentos y hábitos de vida que pueden ayudar a prevenir esta enfermedad.

Hay muchos tipos de cáncer, y es probable que conozcas a alguien que se haya visto afectado por la enfermedad de alguna manera. También es muy posible que a usted le diagnostiquen cáncer en algún momento de su vida. Esto sin importar lo saludable que sea tu estilo de vida. El cáncer se puede prevenir, pero también es una lotería. Puede llegar sin importar prevenciones.

Dicho esto, hablemos de prevención del cáncer: hay varios alimentos y hábitos de vida que pueden ayudar a prevenir esta terrible enfermedad.

Nutrición y Cáncer

El término cáncer es el nombre común que recibe un conjunto de enfermedades relacionadas en las que se observa un proceso descontrolado en la división de las células del cuerpo. 1

¿Sabías que comer alimentos que reducen el riesgo de cáncer también puede ayudar a prevenirlo? Comer alimentos sanos y de origen vegetal puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer de mama y otros tipos de cáncer.

Una mala nutrición también puede ser la causante de la aparición de algunos tipos de cáncer.

El cáncer es un grupo de enfermedades relacionadas que crecen como resultado de mutaciones en el ADN. Estas mutaciones hacen que las células crezcan de forma incontrolada, dando lugar a la formación de tumores.

En la mayoría de los casos, las células cancerosas permanecen latentes, pero pueden llegar a ser peligrosas si factores como las toxinas o la genética siguen favoreciendo su crecimiento.

Una buena alimentación orientada por un nutricionista procura mantener el cuerpo saludable, y evitar la formación (acumulación) de células cancerosas en el cuerpo.

Te Recomendamos: Soporte Nutricional en Cáncer de Colon

3 Consejos para Prevenir el Cáncer

Existen varios factores de riesgo para desarrollar un cáncer

  • Edad
  • Antecedentes familiares
  • Sexo
  • Estilo de vida
  • Presencia de otras enfermedades o virus.

Los nutricionistas consideran que hay ciertos alimentos y hábitos que han demostrado científicamente que reducen el riesgo de contraer cáncer.

Todos estos hábitos están ligados a una vida saludable.

Te Recomendamos: 11 Alimentos que Producen Cáncer sin aparentarlo

Reduzca el sodio en su dieta

Sí, la mayoría de las personas se sorprenden cuando se le dice que debe reducir el sodio (SAL) para prevenir el cáncer.

¿Sabes por qué la sal está en el primer lugar de nuestra lista? Porque es cierto que reducir el consumo de sodio tiene un gran impacto en el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. Ahí la importancia de que nuestra nutrición siempre esté en manos de un nutricionista si tenemos cáncer.

De media, las personas consumen 2.200 mg de sodio al día, lo que supone más del doble de la ingesta diaria recomendada de 1.500 mg. Este elevado consumo se debe a que se utiliza como conservante en muchos alimentos procesados. También se encuentra en la sal de mesa común, por lo que es esencial que reduzca su consumo de sodio en su nutrición si quiere prevenir el cáncer.

La reducción del consumo de sodio puede reducir el riesgo de cáncer de páncreas, colorrectal, de mama, de estómago y de hígado hasta en un 50%. Esto se debe a que el sodio y otros minerales, como el cloro, dañan las células, lo que las hace más susceptibles de sufrir mutaciones y cáncer.

Te Recomendamos: Alimentos Prohibidos para el Cáncer de Cuello Uterino

Consuma muchas Frutas y Verduras

La mayoría de las personas que siguen una dieta sana y equilibrada también consumen muchas frutas y verduras. Resulta que esto es por una buena razón.

La Organización Mundial de la Salud ha aconsejado que todos deberíamos comer al menos 400 gramos de frutas y verduras al día.

Los dietistas nutricionistas recomiendan una dieta rica en frutas y verduras porque esta reduce el riesgo de desarrollar cáncer en un 20%.

El consumo de frutas ayuda a prevenir principalmente los cánceres del sistema digestivo, como los de estómago, páncreas e hígado.

Esto se debe a que las frutas y las verduras contienen grandes cantidades de antioxidantes, que impiden que las células se dañen por las sustancias químicas y las toxinas, evitando las mutaciones que conducen al cáncer.

Te Recomendamos: Alimentos para Prevenir el Cáncer de Estómago

Realiza ejercicio, así sea caminar

Hacer ejercicio con regularidad reduce el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. La razón es que cuando el cuerpo se inunda de endorfinas (sustancias químicas responsables de aliviar el dolor y de darnos sensación de bienestar) libera ciertas hormonas que previenen el daño celular y reducen el riesgo de cáncer.

Los ejercicios para prevenir el cáncer deben estar acompañados de una buena nutrición.

Un entrenamiento de 30 minutos es suficiente para mantenerte sano y reducir el riesgo de desarrollar cáncer. Si está empezando, lo mejor es comenzar con ejercicios sencillos como correr en la cinta, montar en bicicleta, nadar y hacer ejercicios de estiramiento. Hacer ejercicio con regularidad le ayudará a mantenerse sano y enérgico durante toda su vida, y es una excelente manera de prevenir la aparición del cáncer.

No olvide los ejercicios de fuerza

Debe practicarlo al menos 3 veces por semana.

Estos ejercicios aumentaran la masa muscular mediante un régimen de entrenamiento de fuerza planificado es otra forma de reducir el riesgo de desarrollar cáncer. Cuando añades el entrenamiento de fuerza a tu plan de fitness semanal, tu cuerpo libera una hormona llamada IGF-1. Esta hormona reduce el riesgo de cáncer al promover el crecimiento de las células sanas y evitar que las células dañadas se conviertan en tumores.

Los ejercicios físicos acompañados de una nutrición saludable y balanceada son una gran arma contra el cáncer, el asesino silente.

Aunque las células cancerosas se producen de forma natural en el cuerpo, es importante vigilar el riesgo de desarrollar la enfermedad. Realizando ejercicios de fuerza, puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer. La mejor manera de hacerlo es realizando ejercicios de fuerza 3 veces a la semana durante 30 minutos en cada sesión. Si lo haces, puedes reducir el riesgo de desarrollar cáncer hasta en un 60%.

Te Recomendamos: 10 Alimentos para Bajar el Colesterol

Nutrición y Cáncer | Pautas para el Tratamiento

Las pautas de nutrición para el tratamiento del cáncer que te indicamos en este artículo pueden ayudarle a mantener un peso saludable. Por ello es muy importante saber cuales son los alimentos para prevenir el cáncer de mama.

Para evitar perder peso durante el tratamiento, consuma suficientes calorías diariamente. En algunos casos, puede ser necesario perder peso durante el tratamiento. En todo caso, siempre es mejor mantenerse fuerte durante el tratamiento y no enfocarse en perder peso, salvo que por alguna comorbilidad el doctor así lo recomiende.

Si su médico le aconseja perder perder peso durante el tratamiento, por lo regular este se lleva a cabo con moderación, es decir, un kilo por semana como máximo. Necesita proteínas, grasas e hidratos de carbono para mantenerse sano. Puede obtener estos nutrientes comiendo una dieta equilibrada y manteniéndose físicamente activo. Por ejemplo, camine 30 minutos cada día. Si eres inactivo o duermes demasiado, puedes perder masa muscular.

Nutrición y Cáncer | ¿Es importante el nutricionista?

El apoyo nutricional temprano de uno de nuestros nutricionistas es de vital importancia para mantener un estado nutricional adecuado.

El nutricionista procurará en todo momento del plan personalizado mantener la composición corporal del paciente, la función inmunitaria y la calidad de vida. Los pacientes deben recibir un soporte nutricional adecuado desde las primeras fases de la enfermedad (si es posible) y ser evaluados adecuadamente para su inmersión en los posibles tratamientos. Cualquiera de las terapias establecidas es mejor y más eficaz si el soporte nutricional es adecuado.

Comparte este post!

Últimas publicaciones de nuestro Blog

Si te sientes abrumado/a por la pandemia, te podemos ayudar. Agenda tu primera sesión a mitad de precio hoy mismo.