Exploraremos el concepto de trastorno infantil en adultos, cómo reconocerlo y cómo afrontar el trastorno con éxito.

¿Qué es el Trastorno Infantil en Adultos?

Trastorno Infantil en adultos

El trastorno infantil en adultos, se refiere a las dificultades emocionales, conductuales o psicológicas, que se originan en la infancia y persisten hasta la vida adulta. Estas dificultades pueden ser resultado de traumas, negligencia, abuso, problemas familiares o una variedad de otros factores. Algunos ejemplos de trastornos infantiles, que pueden continuar en la edad adulta, incluyen: el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), el trastorno del espectro autista (TEA), y el trastorno límite de la personalidad (TLP). 1

Señales de un trastorno infantil en adultos

Existen algunas señales comunes, que pueden indicar la presencia de este trastorno en adultos.

Estas incluyen:

Cómo afrontar el trastorno infantil en adultos

Afrontar un trastorno infantil en adultos puede ser un desafío, pero hay varias estrategias que pueden ser útiles:

CAUSAS

Trastorno Infantil en Adultos

Existen múltiples factores, que pueden contribuir al desarrollo de trastornos infantiles en adultos, incluyendo:

Tratamiento

La terapia, es una herramienta fundamental en el tratamiento de trastornos infantiles en adultos. Existen diferentes tipos de terapias, que pueden ser efectivas para abordar estos problemas, dependiendo de las necesidades y circunstancias específicas de cada persona.

A continuación, se describen algunas de las terapias más comunes utilizadas, en el tratamiento de trastornos infantiles en adultos:

Es importante trabajar con un profesional de la salud mental, para determinar qué tipo de terapia es el más adecuado para abordar el trastorno, en función de las necesidades y circunstancias específicas de cada persona. En algunos casos, una combinación de terapias puede ser la opción más efectiva.

Tratamientos complementarios

Además de las terapias mencionadas anteriormente, existen otras modalidades de tratamientos, que pueden ser útiles para abordar el trastorno infantil en adultos, como las siguientes terapias:

Recuerda que cada persona es única. Lo que funciona para una persona, puede no ser efectivo para otra. Es fundamental buscar la orientación de un profesional de la salud mental, para determinar el mejor enfoque terapéutico para abordar el trastorno infantil en adultos, en función de las necesidades y circunstancias específicas de cada individuo.